Autor: Guy Delisle
¿De que va?
Tras un año en Jerusalén acompañando a su pareja, miembro de Médicos Sin Fronteras, Guy Delisle nos ofrece en Crónicas de Jerusalén, una de las novelas gráficas más esperadas del año, su personal visión de uno de los conflictos más enquistados de la actualidad.
Delisle nos muestra su lado hogareño, al tener que hacerse cargo del cuidado de sus hijos mientras su mujer está fuera, pero también, sobre todo, las numerosas peculiaridades, extravagancias y absurdos propios de Jerusalén que el autor va descubriendo en sus vagabundeos (Fuente: Astiberri)
Reseña:
Despues de leer Guia del mal padre, me picó el gusanillo con este autor y la historia, a pesar del trasfondo, resulta tan entretenida como aquella.
Cronicas de Jerusalen, cuenta los avatares del autor de comics Guy Delisle durante la estancia de un año en la ciudad israeli, mientras acompañaba a su pareja (miembro de Medicos sin Fronteras). En el tiempo que esta en la ciudad podemos ver como es la idiosincrasia de los jerosolimitanos, los problemas que tienen los palestinos (y cualquiera) para moverse por la ciudad o algo tan simple como tener que cuidar a los crios.
Es un libro interesante porque se adentra un poco mas en el dia a dia del conflicto entre Israel y Palestina (en parte al hecho de que la pareja del autor trabaja para Medicos sin Fronteras y este decide aprovechar para coger toda la informacion que pueda) que la historia de Una Judia Americana Perdida en Israel. Para empezar muestra como se desenvuelven las distintas organicaciones internacionales que operan en la zona (como pueda ser MSF o la OCHA); la vida de los expatriados, que por distintas circunstancias se viven en la zona; con lo que tiene que lidiar el autor en su dia a dia.
Pero lo mas importante, es que ofrece la vision de las dos partes, con lo que el lector se puede hacer una idea minima de lo que ocurre en la zona y mas concretamente en Jerusalen. Y, muy importante, neutral. El autor no se posiciona a favor o en contra de ninguna de las dos partes en conflicto (que no son las unicas, ya que las distintas creencias cristianas, tambien andan en conflicto entre ellas), simplemente se limita a ser un observador que cuenta su experiencia en la zona y que irremediablemente se ve envuelto en las circunstancias directa o indirectamente.
Tambien tiene momento para el humor, por que apesar de todo, se sirve de él para intentar explicar lo mejor posible las situaciones surrealistas que se llegan a producir muchas veces bien por las condiciones en que se vive en la ciudad de Jerusalem (ir respetando normas o las creencias religiosas/costumbres de unos y otros); tener que ir con cuidado por no ir a tal o cual sitio porque si no estas apoyando a los colonos (genial el momento en que entra en un supermercado situado en la zona de los colonos, ve sus cereales favoritos y se debate entre comparlos o no sin favorecer a los colonos); o intentar montar un taller de comics en Cisjordania.
En definitiva es una historia interesante que si bien no arroja ninguna luz sobre el conflicto entre Israel y Palestina, si ayuda a comprenderlo (mas o menos) y verlo como lo veria cualquiera de nosotros si se plantase en la ciudad.
